Seguidores

martes, 20 de septiembre de 2011

Lo grande de ser pequeño.

Que curiosa que es la vida. Recuerdo las veces que, de pequeña, pensaba en las inmensas ganas que tenía de hacerme mayor. Tenía que ser rápido, muy rápido, para poder hacer todas esas cosas que mi niñez me impedía alcanzar. Y es curioso que, ahora que ya no soy una niña, no hay un día que pase sin anhelar todo aquello, y me doy cuenta precisamente, de que mucho de lo que hago tiene ese punto de madurez que me aleja de lo que persigo: poder seguir siendo pequeña. Porque los pequeños caben en los sitios pequeños. Pasan desapercibidos ya que apenas se les ve, y se les oye poco porque no hacen casi ruido. Son pequeños y precisamente por eso son tan grandes.
Y no es que yo no quiera ser mayor. No. Es que me siento mucho mejor cuando me hago pequeña. ¿Me seguís? ¿Alguien me sigue? Si lo haces, si lo hacéis, preguntaos tras esta reflexión, por qué no es nada difícil impregnarse de la energía positiva que desprende un niño. Un pequeño. En cambio, no es nada extraño encontrarse con imperios de negatividad y tristeza alojados tras las palabras de un “no pequeño”. De un mayor. A lo mejor será que no evolucionamos, sino que sufrimos una profunda y completa involución mientras vamos creciendo. Podría ser. Mientras lo pienso, dejadme que os diga que la historia de mi vida es la historia de una niña, que decidió, solo cuando lo necesitó, tomar el camino de los grandes.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Decidí tocar el fuego y me quemé. Nunca abro mi corazón a nadie, ni me decreto por nadie. Siempre fui la última en querer. Llegué a pensar que jamás lo haría, pero apareció el fuego. Ese maldito fuego que solo quería quemarme y nada más.
Al final de todo, he aprendido que no merece la pena entregar parte de tu cabeza a alguien, jamás mereció la pena. Me confundí. Siempre me confundo. No era la persona indicada, no lo era.
Lo que más me vulnera de esto es que cada día intenté hacer lo mejor que podía hacer, seguir a mi corazón. Pero el maldito fuego no seguía a su corazón, yo no era su corazón. Nunca lo fui, porque el corazón puede querer limitadamente, pero no a tan corto plazo.
Me quedo en mente que cuando dije: Que se atreva a alguien a decirme que no sé querer, decía la verdad. Quise como nunca quise a alguien, hice cosas que jamás pensé que haría. Luché día y noche por seguir. Confíe lo que nunca había confiado. Y, evidentemente, me choqué contra la pared más grande que había en mi camino. Ni me quiso, ni quiso luchar.
Querido fuego del pasado: espero que ahora seas lo feliz que querías ser. Que te guste mirar al futuro porque ya no estoy. Que disfrutes de tus paseos por donde solías ir conmigo. Y que quieras de verdad... como nunca me quisiste a mí. 
 

Nunca te obligué a quererme, pero si yo no era lo que querías, ahorrarse todo ese tiempo  juntos hubiese estado genial.

martes, 13 de septiembre de 2011

+ Tía pero no seas así…
- Es que me quiero olvidar de él… ¿Cómo queréis que sea? Joder…
+ Va a ser muy difícil
- Además es que no me sale ser de otra forma...
+ Y más si él sigue luchan por ti
- Es de idiotas…
+ Yo estaría con él que quieres que te diga por muchas cosas que haya…
- Yo paso... encima decía cosas que no eran ni medio normales…
+ Yo no pasaría, porque sé que con él no lo voy a dejar hasta dentro de muchísimo tiempo… lo quiero de verdad, nunca había querido a nadie aquí dentro ni fuera. Tiene esos prontos…
- Yo paso, de verdad...
+ Pero no piensa lo que dice.
- Pues paso de esos prontos, porque dice todas esas cosas… pero ¿sabes qué? Que tiene novia…
+ Ya.
- Y no puede decirme esas cosas porque me está puteando, y a mi hazme lo que quieras pero putearme no…
+ Puffffffff…
 - Que me sacarás todos los años que quieras pero de tonta tengo un pelo. Asique mira que vaya parando y busque a otra para putearla.
+ No lo veo así, ¿quien acabó la relación?
- Yo, y le deje bien claro por qué… asique venga, ya está.
+ ¿Por qué? Si se puede saber…
- Porque estoy harta de todas las cosas que nos separan…
+ Yo no veo eso.
- No puedo querer a una persona que esta tan lejos… Esa persona que quieres tendría que estar a tu lado, para verla, para abrazarla…
+ Le quieres al fin y al cabo… yo antes pensaba así, pero… ¿de qué me sirve? Si sin esa persona no puedo seguir por muy lejos que esté.
- ¿Y qué? ¿Le quiero y qué? Ya se irá lo de quererle… Poco a poco voy pudiendo seguir, llegara un día que podre del todo porque ni le he visto en mi puta vida, dudo que le vea y no es la persona con la que haga mi vida… y si, suena maricón…
+ No suena maricón, suena frio.
- Que suene como quiera… pero las cosas son así, te guste o no te guste.
+ Pero esa es tu manera de pensar ahora, porque ha dicho esas cosas…
- Llevo diciendo esto mucho tiempo... a lo mejor no tan cabreada, pero si lo he dicho. Hare mi vida con otra persona, ¿con él? Lo dudo… hasta me rio, soy joven me queda muuuuuuuuuuuucho tiempo. Y paso de amargarme con uno de los primeros.
+ Sí, haces bien. No te encadenas a nadie.
- Ni me pienso encadenar… hasta que no esté segura de que esa es la persona que quiero.
+ Bueno…
- Las bicicletas solo son para verano…
+ ¿Qué quieres decir?
- A mi esa frase me la han dicho muchas veces, y no se han equivocado ninguna vez… que todo viene y va… y estas cosas duran un verano, y con verano me refiero a un tiempo limitado… y ZÁS se acabó.
+ Ya... lo peor es que tienes razón.
-Ah amiga… no será el caso de todos, pero el mío sí.
+ ¿A qué te refieres?
- ¿Ahora tengo motivos o no los tengo?... Pues me refiero a que no puedo generalizar, a ti te puede ir bien con él y acabar toda la vida juntos… a ti o a cualquier otro ¿sabes? Pero yo mi caso lo sé, porque me conozco y sé como son las cosas para mí.

domingo, 11 de septiembre de 2011


Tú.

Nuestros dedos se entrelazan, el mundo desaparece. En un solo instante estamos los dos en una realidad alternativa, en una que tú y yo creamos. Dejamos a la gente atrás, solo nos sentimos a nosotros. Ellos no existen, sus voces no se oyen en ese lugar al que escapamos. Sus gestos, movimientos, todo se marcha. Todo se va para dejar paso a nuestras nuevas sensaciones.
Tus manos tocan las mias. Tus dedos se entrelazan con los mios. Nuestras manos encajan. Tus dedos, tus manos, tu piel, me encantan. Mataría por besarlos cada día, por tenerlos siempre a mi lado, para jugasen conmigo.
Nuestros cuerpos se juntan. Me apoyo en tu hombro. Hueles mi pelo. Suspiramos. Me levanto poco a poco. Me pongo de puntillas. Alzo la cabeza. Estamos a la misma altura.
Te miro a los ojos. Esa mirada. Esos ojos que con la magia del sol pasan a ser verdes. Me veo en ellos. Descubro como soy para ti. El amor que sientes. Suelto tu mano. Levanto la mia despacio hasta llegar a tu cara. Te acaricio. Mis dedos tocan tu mejilla, rozan tus párpados.
Una sonrisa se dibuja en tu cara. Buscas mi mano, la encuentras. La besas. Me miras. Descubres que yo también te quiero. Nuestras manos se vuelven a juntar, volvemos al principio.
Nos acercamos. Casi nos rozamos. Siento tu respiración. Nuestros labios están cada vez más cerca. Me besas. Siento tu corazón.
Me quieres.
Soltamos las manos. Me agarro a tu cuello, coges mi cintura. Separamos nuestras bocas. Nos volvemos a mirar. Tus ojos, mis ojos. Tu labios, los mios.
Te digo que te quiero. No me respondes. Tengo miedo. Me vuelves a mirar. Ves el dolor en mis ojos y te acercas a mi cuello. Me das un beso. Un pequeño roce de tu boca con mi piel. Tus labios buscan mi oreja. La encuentras. Sigo dudando. Y me susurras que me quieres. Y nos volvemos a mirar.
Nos besamos otra vez. Otra, otra más, y otra. Nuestras respiraciones se hacen una. Aceleran. Nuestros cuerpos se juntan.
Tus manos acarician mi cintura, mi cadera, buscas mi piel. Tocas mi barriga, mi espalda. Las horas se convierten en minutos y estos a su vez en segundos.

viernes, 9 de septiembre de 2011


Duele ver como una persona a la que pensabas conocer, en realidad es un desconocido. Duele ver que crea rumores y más duele, que a pesar de todo, no seas capaz de odiarle.
Tal vez fue por el cariño que le tuve y lo tanto que le quise, pero lo único que sé es que no soy capaz de odiarle, por mucho que haga, el odiarle no me sale, y no, no le sigo queriendo como antes, simplemente lo quise con tanta fuerza que no consiga hacerle daño de ninguna manera.
Es increíble, como la gente oye a los demás, sin tener ni idea.
Solo quiero hacerte saber, que ya no te quiero como antes... a lo mejor te quiero muchísimo más, no lo sé. Lo que si que tengo claro es que perder tu amistad ha sido como si me clavaran un cuchillo, quiero hacerte saber que aunque ahora pase por tu lado con total indiferencia, me sigues importando... y me sigo dando la vuelta a tu pasar.
¿Y por qué? Porque ya no te quiero de esa manera como antes, es verdad, pero porque no he olvidado todo lo que pasamos, son recuerdos, que no comprendo cómo pudiste tirarlos todos por la borda, pero allá tú, estoy segura de que nunca más me verás llorar. Hablas de perdón pero no voy a seguirte el juego, si, te quiero, pero no voy a arrastrarme para que me perdones por algo que no he hecho.

martes, 6 de septiembre de 2011


Que decirte tía, mi vida, mi corazón, la que está ahí en lo bueno y en lo malo, la que con tan solo mirarme a los ojos ya sabe lo que me pasa, la que hace lo imposible para que sonría, aunque esa sonrisa sea pequeñita… te deseo lo mejor, de verdad, y mas hoy 5 de Septiembre, que hasta el último minuto te pasen cosas únicas, especiales, cargadas de risas, emociones, sueños… Deja las lágrimas a un lado y todo lo que no te deje vivir la vida, feliz, con ganas, con sueños por lo que luchar, por gente, por la cual sonreír día a día. Nunca olvides, que en todo este tiempo aprendiste a sonreír y a sufrir… pero lo de sufrir déjalo, que ya habrá tiempo para eso, por lo que hazlo todo con esa gran sonrisa que fusila a todo el mundo. No te conozco de hace mucho, pero aun así tengo que darte las gracias por las veces que has estado ahí para levantarme cuando yo me caía asique jamás de los jamases dudes que yo te pueda ayudar en algo, sea el día que sea a la hora que sea. A partir de ahora aprovecha cada segundo del día, no te entretengas en cosas que te hagan sentir mal que esos días no se aprovechan y es tiempo que se va para siempre… y eso no es así, tienes que aprovechar cada momento y no perder la oportunidad de demostrar lo que tu eres… Joder, tienes que estar diciendo… ¡QUE PESADA ES ESTA NIÑA!, lo sabes de sobra soy una pesadilla de niña  y que me enrollo más que una persiana ;) Pero espero que con estas pequeñas cosas que te digo pueda demostrar que tienes una persona en la que confiar siempre. Y que tia... puf que no cambies que eres una niña de puta madre.


 

Y eso, que felicidades... que te quiero, lo sabes de sobra.
Dulces quince, disfrutalos que te los mereces mi niña.

P.D: Perdóname, ya se que hoy es 6 de Septiembre... pero ayer no pude escribirte nada :(